Declaración de amor propio

A ratos me reconozco en el espejo,
me miro a los ojos
y me digo que en el fondo
no lo estoy haciendo tan mal.
Luego me sorprendo acariciando mis complejos,
llenando mis vacíos de rosas
y dándome espacio para crecer.

Ya no me maquillo mucho
pero me quiero más,
me escucho
y me doy exactamente lo que necesito.
Ahora sé que necesito encontrarme,
desaprender todo lo aprendido
y descubrir quién soy.

Voy a hacer una promesa conmigo misma
y la grabaré a fuego en mi piel.
Luego me escribiré una carta,
pues hay cosas que nunca debo olvidar:
no hay persona en el mundo
que más necesite mis abrazos,
ni persona que más los merezca
que yo misma.